La viruela del mono, virus de estigmatización
La viruela del mono, virus de estigmatización
Tras el Virus de
Inmunodeficiencia Humana (VIH) en la década de los 80, hubo una gran oleada de
estigmatización sobre la comunidad LGBTI. Años anteriores en la década de los
70, se da el primer caso de la viruela del mono en humanos en la República
Democrática del Congo. Virus que después de 52 años comienza a expandirse por
varios lugares del mundo generando al igual que el VIH estigmatización hacia la
comunidad gay.
El mundo no ha
salido del covid-19 cuando ya es golpeado por otro virus que se expande de
manera rápida. 2022, año en el que la viruela del mono comienza a salir de su
refugio en África. Afectando a todo el mundo, pero, poniendo en alto riesgo a
hombres homosexuales.
La viruela del
mono es un virus que se detectó por primera vez en 1958. Este virus es una
enfermedad que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) es zoonótica, lo
que quiere decir que se contagia de animales a humanos. También se puede
propagar de persona a persona. Esta enfermedad se llama así porque se detectó
en varios simios de un laboratorio. En esa época de los años 50´s por el
momento se consideraba endémica, es decir que solo se propagaba en algunas
zonas como África Occidental y Oriental. Sin embargo, esta se comienza a
propagar a inicios de mayo de 2022, donde países europeos comenzaron a
registrar los primeros casos de la viruela. Con erupciones cutáneas, fiebre, tos,
fatiga y dolores musculares es como se presenta este virus en el cuerpo humano.
Pero, ¿cómo se
propaga esta viruela? Según un
informe presentado por la Organización de Naciones Unidas (ONU) se propaga
cuando “las personas que tienen la enfermedad
son contagiosas mientras tienen síntomas (normalmente entre las primeras dos y
cuatro semanas). Se puede contraer esta afección a través del contacto físico
con alguien que tiene síntomas. Las erupciones, los fluidos corporales (como
fluidos, pus o sangre de lesiones en la piel) y las costras son particularmente
infecciosos. El contacto con objetos que han estado en contacto con la persona
infectada como la ropa, ropa de cama, toallas u objetos como utensilios para
comer también pueden representar un foco de infección.”
Sin
embargo, también hay otra forma de contagio, y es la sexual. Esta forma de
propagarse, es la que hasta el momento ha generado estigmas e incluso
discriminación a hombres que tienen sexo con otros hombres. Problemática que se
expande con rapidez y que aqueja a la comunidad LGBTI. Pues, se dice que dicha
discriminación se da precisamente por conductas netamente sexuales, a lo que
también conlleva a que se diga o se indique que la viruela del mono sea una
enfermedad de transmisión sexual (ETS).
Según
el Dr. Juan Carlos Ávila Morales, médico especialista en salud pública y
docente e investigador de la facultad de medicina de la Universidad Militar
Nueva Granada dice que “la OMS está aclarando esto precisamente para que la
enfermedad no tenga la característica de una enfermedad estigmatizante, es
decir que aquella persona que tenga viruela del mono, se le estigmatice o se le
diga que la enfermedad fue causada por contacto sexual” y también afirma que
“hay una preocupación por parte de la OMS en que la enfermedad no se encasille
en una enfermedad que sea de homosexuales, que fue lo que ocurrió con el SIDA,
y que con el pasar del tiempo se demostró que no es una enfermedad de un grupo
sexual sino que está asociada a conductas sexuales, y que a cualquier persona
le puede dar. Es por eso el afán de la OMS en que con la viruela del mono no se
cometa ese mismo error de estigmatizar.”
Asimismo,
el doctor Ávila, dice que el tema de estigmatización y discriminación hacia
personas que en estos momentos tienen más riesgo de contagio “es un tema de
empatía y de trabajar con las comunidades, entender la enfermedad y ser
empático con el otro” es decir que al ser este virus un tema estigmatizante
termina provocando procesos de persecución, señalamiento y exclusión, por lo
que el doctor también dice frente a esto es que “el principal punto para estar
en contra de este proceso de estigmatización es la información y la
comunicación verás, donde la gente se informe bien para generar una empatía
frente a la persona que lucha con la enfermedad”.
Pero
a pesar de que tanto el doctor Ávila como en muchos artículos se dice que este
virus no debe ser una problemática que afecta a solo un grupo de la sociedad,
la realidad, es que según muchos artículos de la CNN, esta enfermedad ataca a
cualquier persona sin distinguir, sexo, género, orientación sexual, creencia
y/o religión, pero que si realmente se debe tener precaución, pues los casos de
aumento se ven más reflejados en hombres que tiene sexo con otros hombres, pero, haciendo énfasis en no caer en
prejuicios y estigmas.
Por otro lado, tanto ha sido el estigma sobre
este virus, que se ha llegado a decir que es una ETS. Por lo que en el diario
CNN han entrevistado a expertos donde hablan acerca de este tema, como por
ejemplo Kristen Nordland, portavoz de los
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus
siglas en inglés) donde dice que “no existe un proceso formal para etiquetar
una infección como ITS o ETS” y que "los expertos generalmente determinan,
científicamente, si un patógeno puede transmitirse a través del sexo, en cuyo
caso se le denomina 'transmisible sexualmente'. Y la frecuencia con la que a
una infección se le considera ITS se relaciona con la proporción de
transmisiones por sexo frente a alguna otra ruta… "
Pero a pesar de que se diga que la viruela del mono no es una
enfermedad de transmisión sexual, sigue habiendo esa discriminación y
estigmatización hacia la comunidad. Es por eso que Andrea Castañeda,
maquilladora de cine, televisión y teatro y que hace parte de la comunidad
LGBTI dice que “le parece terrible que en pleno siglo XXI, donde por mucho
tiempo han discriminado a la comunidad LGBTI siga ocurriendo esto” y pues
también afirma que “esta misma estigmatización si puede darse por el contacto
sexual, y que este tipo de prácticas no solo están vinculadas a la comunidad.”
Tal es la dicha discriminación en pleno siglo
XXI, que, en Estados Unidos, según INFOBAE se presentó un caso donde técnicos
de los laboratorios de pruebas Labcorp y Quest Diagnostics, se negaron a
extraer sangre de pacientes que podrían tener viruela del mono. A lo que David
Harvey, el director de la Coalición Nacional de Directores ETS afirma que “esto es
absolutamente inexcusable. Es una grave negligencia de sus funciones.”
Pero, ¿cómo se podría borrar esas brechas de estigmatización
hacia un grupo de personas? Según Andrea Castañeda, afirma que “informando a la
gente que es una enfermedad que le puede dar a cualquier persona que tenga
relaciones, y que cualquiera puede estar expuesto” y que se debería “fomentar
el respeto por los demás y no señalar simplemente por tu orientación sexual u
orientación de género, porque esas cosas ya están mandadas a recoger.”
Por: Brayan Sierra
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